domingo, 13 de noviembre de 2016

LAGOS DE SOMIEDO.







Esta vez voy a añadir al blog unas fotos del pasado puente, que anduvímos por la zona de Somiedo.





 Lo cierto es que esta es la tercera vez que vengo y la primera vez que alcanzo a ver los lagos. La niebla y el mal tiempo me lo negaron las veces anteriores.



 El primer día subimos a Saliencia e hicimos la ruta entre lagos.





 Ahí tenemos el primero, el Lago de la Cueva.




 
Desde otra perspectiva. Bonito, eh?





 Caminando por la zona.





 Bajamos al Lago Cerveriz...


 Y nos asomamos al Lago Calabazosa.


Que es el lago más grande y profundo de la zona, creo.


 Y para mí el más bonito de todos.


 Buen sitio para comer el bocata, que no?


 Aquí debería estar la Laguna de la Mina. Seca, como se ve.


 Mineral de hierro, se debía de extraer por aquí...


 Y nos bajamos ya, disfrutando del colorido.


 Al otro día comenzamos nueva ruta por el Valle del Lago.


 Praderías maravillosas...


 Empezamos a ver teitos.


 La verdad es que el tiempo se portó estos días con nosotros.


 Cartél disuasorio :-)


 Ya en el Lago del Valle.


 Impermeabilizando el teito. Cada cuatro años o así lo hacen, nos dicen.


 Mi vaca chuletera  :-)


 Rodeando el lago.


 Espectacular...


 Y ahora bajamos por una ruta alternativa que atraviesa un hayedo.


 Preciosos los colores del Otoño.


 El gato guardián del pueblo :-)


 Al otro día subimos a La Peral, un pueblo vaqueiro muy bonito.


 Las vistas maravillosas; el mirador horrible, he de decirlo.


 Ahora subimos hacia la Braña de Mumián.


 la Penouta, nos dicen que se llama ese pico.


Ya en Mumián. Montón de teitos que hay aquí.


 Algunos semicaídos, que pena.


 La verdad es que las construcciones de la zona son obras de arte.


 Y ahora nos vamos a bajar por este otro hayedo a Pola de Somiedo.


 El acebo en todo su esplendor.


 Otoño mágico...


 Ya casi abajo.


 Y ya en nuestro alojamiento disfrutando de la sala museo llena de curiosidades de la zona. Gracias por tu hospitalidad, Pluvio :-)


 Y eso fue todo. Han sido unos días inolvidables conociendo algo del Parque de Somiedo, pero no lo suficiente y hay que volver. En Invierno, quizás :-)


miércoles, 12 de octubre de 2016

VEGA DE ARIO Y PICO JULTAYU.



Tras un largo parón en el blog (por perezaca que me dá, más que nada) voy a colgar unas fotos de esta semana pasada, que subí a la Vega de Ario, en los Picos de Europa, para luego acceder al Jultayo.
 Antes de empezar a subir hacia los Lagos, echamos un vistazo desde lejos al Santuario de Nuestra Señora de Covadonga.

Y obligada parada en el Mirador de la Reina; las vistas son indescriptibles.
Siempre que subo por Covadonga me gusta parar a echar un vistazo al Lago Enol, que está precioso.

Y al Lago Ercina, que es desde donde parte la ruta hacia Vega Ario.

Empezamos poco a poco a coger el sendero.
Otra perspectiva del Lago Ercina.
Hacía un día bonito y disfrutón.

Se empieza a ver algo de ganado.

Llegando a los invernales de Las Bobias.

Plácida vida, eh?

Seguimos ganando altura.
El terreno va cambiando y vemos ya algunos picachos.

Seguimos subiendo ya por terreno más pedregoso.
Y ya estamos en la Vega de Ario.

Que me acerco al refugio a tomar una cerveza :-)

Brisa, la guardiana.

Y ahora me quiero acercar al Pico Jultayu.

Tomando referencias...

Aún sin llegar arriba, ya se aprecian unas buenas vistas del Macizo Central.

Sigo subiendo por la canal que hay entre el Jultayu y el Cuvicente.

Que ya estoy casi arriba.
Rebecos a lo lejos, siempre curiosos, ellos.

Y esta es la cumbre del Pico Jultayu, 1940 metros.


                                                Un corto video de la llegada a la cumbre.


Y ahora me tomo un tentempié, que en la montaña también se puede comer rico :-)


Disfrutando de las vistas.
Ahí nos asomamos para ver el pueblo leonés de Caín, unos 1400 metros más abajo.

Caín de arriba...

Y Caín de abajo.


Muuuuuucho zoom.


La senda de la garganta del Cares.

Y quería cumbrear por esta loma hasta el Cuvicente para poder ver mejor la zona de Peña Santa...
Cuando empezaron a entrar estas nubes que no me gustaron nada.


Así que me bajo sin perder demasiado tiempo.
Tomando referencia con la brújula de la posición del refugio. Solo por si acaso.

Se iba cerrando...

Cada vez más...
Hasta que...


No soy muy partidario de que pinten referencias en la piedra, pero he de reconocer que esta vez me vinieron de perlas.

Y nada, sin más dificultades, ya estoy casi otra vez en Ario.

Que en algún sitio estará el refugio, digo yo.

Sí, ahí se percibe.

Hola, vacas.

Y hola, burros.

Pues nada, al día siguiente amaneció igual y comencé a bajar.

Me despido de la gente del refugio...

Y me vuelvo por donde he venido.


Es muy importante con estas nieblas ir muy atento al terreno.

Siguiendo jitos...

Y siguiendo marcas.

Ya a medio camino la niebla no es para tanto.

Que se van viendo ya colores de Otoño.

Lorenzo lo intentaba, el hombre.

E incluso en Las Bobias hubo una ventana de cielo azul.

Pero siguiendo hacia los lagos seguimos en las mismas.

Bueno, pues ahí se adivina ya el Lago Ercina.

Y eso fue todo; ha sido una ruta de dos días en solitario que me ha sabído muy bien. Gracias a tod@s por vuestra atención.